DOS VICTORIAS, EN LA PLANILLA Y LA ESTRELLA

Los jugadores del A.F.Calahorra se ganaron en la segunda mitad los tres puntos por derecho propio ante un rácano Alberite que solo se dedicó a defender y más defender. El partido fue muy igualado tal y como se preveía antes del pitido inicial, con dos equipos que saltaron al césped con muchas precauciones, pero que desde el primer minuto con dos papeles muy distintos: los rojillos llevando la batuta de mando, con el balón en los pies y tratando de encontrar portería de Santi y los jugadores del Alberite encerrados en su terreno de juego, con dos líneas muy juntas en las inmediaciones de su área y buscando como arma ofensiva las salidas rápidas en contragolpes, ante una zaga local que no dio mucha seguridad en la tarde de ayer. Pocas oportunidades de gol en la primera mitad que presagiaba que quien se adelantara en el marcador se llevaría los tres puntos. Los de Tejedor avisaron primero, con un disparo de Iván en el trece que de vaselina puso a prueba al cancerbero visitante y en el 24 con los mismos protagonistas pero a balón parado. Los minutos pasaban y el A.F. caía en una monotonía de juego, intentando romper por las bandas sin fortuna, gran culpa tuvo el marcaje al que fue sometido Álvaro. Muchas dificultades para Iván Alcalde sin espacios para profundizar desde la medular y con Alberto que con jugadas individuales intentaba romper el marcador, pero se encontraba que tenía que lidiar con hasta cinco hombres. A pesar de ello en el 32, logró zafarse de esta presión y se quedó cara a cara con Santi, que en una gran intervención evitó el gol sobre la línea. Y como sucede en el mundo del fútbol, un balón suelto en el área local acababa con penalti señalado contra el A.F. por mano de Alonso, que no pudo evitar el contacto con el esférico. Óscar no perdonó y adelantó a su equipo en La Planilla. Jarro de agua fría que dejó a los rojos helados, pero que tuvo efecto positivo en la segunda mitad, con la entrada en el campo de Borja y Gorka, que dieron más mordiente y aumentaron los problemas de los defensores visitantes en las marcas, abriendo el campo y provocando más espacios. En los primeros cinco minutos, el Alberite podía haber sentenciado el encuentro, con dos jugadas en la que el Calahorra jugó con fuego, dejando a Picuchos II en manos de Carrillo, pero el portero local salvó con la rodilla y en la ocasión posterior Moha falló por muy poco en su disparo raso buscando a la base del póster. Después el partido se tiñó totalmente de rojo. Santi se convirtió en el hombre clave de su equipo con hasta tres intervenciones ante Borja. El más claro, un pase de la muerte de Álvaro que Borja chutaba dentro del área y se chocaba con las manos de Santi. Gorka hacía justicia, colocando las tablas en el marcador, cruzando su disparo desde la frontal lejos del alcance de Santi. En pleno asedio local solo una oportunidad aislada de Moha desvió Picuchos II a mano cambiada. A falta de nueve minutos para los noventa, Álvaro lograba su recompensa y entrando por la izquierda del área arlequinada culminando la remontada. En los últimos minutos llegaron las prisas de los hombres de Víctor Santolalla, que veían como su plantel defensivo se les volvía en contra y les condenaba a la derrota, volcándose desesperadamente al ataque, dejando solo a dos hombres en el centro del campo, lo que casi aprovecha Álvaro para sentenciar el marcador en el tiempo añadido. Al final, tres puntos que no se van de Calahorra y una remontada que vale su peso en oro ante un rival directo.

Esto sucedió en el Municipal de La Planilla, mientras tanto seguíamos por la radio al C.D. Calahorra en la Estrella que remonataba un encuentro que se puso en contra muy pronto con un tempranero penalti y en el que acabó goleando (2-5) y certificando así su pasaporte a la cuarta posición de la tabla, es decir, el pasaporte a los puestos de play-of de ascenso.