Esta mañana me he levantado con una sonrisa de oreja a oreja, después de soñar con que éramos campeones del mundo, sufriendo como siempre pero demostrando que el fútbol lo han puesto nuestros jugadores a base de pases, ataques, ocasiones y sobre todo de fútbol, y así se fue desarrollando el sueño, con una marea en los pies de Quintiliano, gran orador que lució ayer sus mejores galas como un español más de roja y gualda. Y tras ver ese fiestón, me tocó correr y correr para mandar las fotos al periódico y enchufar el ordenador para que Manolo Escobar hiciera acto de presencia en la Glorieta y comandaría a una ciudad volcada con su selección que no hizo más que bailar, cantar y soñar despierto. Luego la fiesta duró en mi caso hasta las 4 de la mañana y en mi sueño cenaba y me iba a la cama volando, muy cansado pero contento. Lo mejor ha sido cuando he pasado a desayunar y he visto el periódico (agotados hoy) y he comprobado que no era un sueño, sino una realidad, que Calahorra vibró como el resto de España y con sus jugadores se proclamó campeona del mundo. JEJEJEJEJE. Que sueño más lindo. Gracias a todos y todas que vibrasteis con la Roja.
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