En agosto estuvimos todos muy atentos sobre el futuro de nuestro Puma, super Mario Barco, y al conocer que se iba del Calahorra tuvimos sentimientos variados, tristeza porque es un jugador de raza, que siente lo que hace y que lo da todo en el terreno de juego y además, en mi casa personal, es un buen chaval, y por otro lado la familia rojilla sentimos una gran alegría por esta nueva aventura, una gran oportunidad en el equipo capital del fútbol riojano actual, en el mundo de la segunda B, que creo que es un escaparate perfecto y magnífico para crecer y hacerse jugador de fútbol, por eso y por muchas cosas más, muchísima suerte PUMA. Echo de menos el celebrar por la megafonía de La Planilla los goles del Calahorra obra y gracia del PUMA, Mario Barco. Aquí os dejo la entrevista que sale publicada en diario La Rioja de Charly Ferrer a Mario.
26.09.12 - 00:12 - CARLOS FERRER El delantero centro calahorrano ha anotado los tres goles que ha marcado el equipo y demuestra en cada partido su progresión .Mario Barco UD Logroñés.
«En el vestuario me han ayudado mucho desde el primer momento a incorporarme al equipo y así poder rendir al máximo nivel»
«Justo después de meter el gol de Torrelavega en propia puerta volví a situarme en mi sitio para defender la portería en otro saque de esquina»
«Tengo claro que no se deja de aprender hasta que se termina de jugar. Y no se puede bajar el rendimiento si quieres mantener tu progresión»
«Es un orgullo ver que puedo jugar todos los partidos. Sé que no me puedo relajar porque mis compañeros tienen mucha calidad».
Podría decirse que sólo son tres goles, pero es que son los tres que ha marcado la Unión Deportiva Logroñés en este inicio de temporada y que han servido para que el equipo haya sumado cinco de sus seis puntos y que, además, haya conseguido la primera victoria de la temporada. Fue el pasado domingo, frente el filial del Zaragoza.
Mario Barco llegaba a Logroño precedido de cierta fama de joven delantero centro con posibilidades de ser futbolista. En el Calahorra ya había demostrado sus cualidades, pero le faltaba dar el salto. Ha llegado a la UD Logroñés, está trabajando a destajo y se está ganando el puesto a base de buen hacer y de marcar goles, que es, además, lo que más le gusta. Delantero puro. Y lo mejor que tiene Barco es que además de apreciar un futuro interesante, tiene la cabeza bien amueblada, sabe lo que quiere y, al margen de vivir por y para el fútbol, también quiere encauzar su vida por otros derroteros cuando finalice su periplo deportivo. De hecho, ayer mismo empezaba a estudiar el curso puente para obtener el grado superior de Formación Profesional. Tiene contrato para esta temporada y otra más y no quiere oír hablar más que de seguir jugando y aportando su fútbol al equipo, su mayor obsesión.
Tras haber salido fuera de Calahorra cuando era cadete, ahora afronta la segunda ocasión en la que sale de casa, porque quiere una nueva oportunidad para dejarse ver, para darse a conocer.
- ¿Quería jugar en un filial o seguir en La Rioja?- Yo lo que he dicho es que si no me salía un filial, por mi edad (19 años), para seguir progresando, me veía en Logroño jugando en Segunda B. Preguntaron por mí en la Peña Sport, pero no quise irme de nuevo a Tafalla.
- ¿Cree que ha acertado en su elección?
- Claro, plenamente. Sabía que iba a tener minutos y estaba convencido de que los iba a aprovechar. Ahora estoy en una nube, pero pensando sólo en seguir trabajando al máximo, que es la única forma de hacer las cosas bien.
- ¿Cómo ha encajado en el vestuario?
- He estado siempre a gusto. Los compañeros me han ayudado mucho desde el principio a incorporarme al equipo y así poder rendir al máximo nivel. Estoy muy bien. Me ayuda mucho saber que me siento muy bien y trabajar, porque todos los jugadores de este equipo son muy válidos y es muy difícil conseguir un puesto en el once inicial. No veo que la plantilla sea corta, porque todos los futbolistas somos competitivos y cualquiera puede jugar.
- ¿Es consciente de que está aprendiendo?
- Tengo claro que no se deja de aprender hasta que se termina de jugar. Y no puedes bajar ni los brazos ni tu rendimiento si quieres mantener tu progresión.
- ¿Le ha dejado secuela el gol de Torrelavega en propia puerta?
- Para nada. Justo después de meter el gol de Torrelavega en propia puerta volví a situarme en mi sitio para defender la portería en otro córner. Es mi trabajo y lo tengo que hacer.
El gol de Zaragoza
- Tres goles ¿Cuál le ha dejado mejor cara?
- En Torrelavega fue el que mejor me sentó. Pero luego se me vino el mundo encima cuando marqué en propia puerta. Me hizo una ilusión tremenda marcar contra el Rácing en Las Gaunas porque además del gol, lo celebré con el fondo, donde la gente anima mucho al equipo. Pero ha sido el gol frente al Zaragoza el mejor de todos, porque nos ha dado tres puntos y nos va a ayudar a tirar para arriba. Es de lo que más orgulloso me siento.
- ¿Algún recuerdo para Barrón?
- En los tres goles que he marcado ha intervenido Alain Barrón. El primero fue un rechace tras disparo de Alain. En Logroño, marqué después de un centro desde la izquierda; y en el tercero, otro centro, aunque esta vez a la cabeza. La verdad es que en cada vez que coge la pelota pienso que me puede llegar el balón y marcar. Me siento muy bien jugando cerca de él.
- ¿Cuál es el sentir del equipo tras conseguir la primera victoria?
- Muy bueno. Estábamos convencidos de que tenía que llegar el triunfo. Mientras tanto, no hemos tenido ningún bajón, hemos trabajado con la cabeza alta sabiendo que la primera victoria llegaría. Si llega, sumas tres puntos y te pones en una situación más cómoda, mucho mejor. Esto es lo que nos va a motivar a nosotros y a la afición para seguir ganando partidos.
- Hay nombres contrastados en su puesto. ¿Cómo se siente jugando usted?
- Es un orgullo ver que puedo jugar todos los partidos. Sé que no me puedo relajar lo más mínimo porque mis compañeros también quieren jugar y tienen mucha calidad para hacerlo.
- Entrenarse todos los días habrá supuesto un cambio en su forma de entender el fútbol...
- He experimentado un cambio muy positivo. He estado trabajando muchas veces solo, sin compañeros, y aquí somos todos iguales y tenemos que darlo todo para jugar. Eso me ayuda mucho para seguir mejorando.
- ¿Qué tal los estudios?
- Ayer mismo comencé el curso puente para el grado superior. Yo creo que no hay que dejar los estudios. Nunca se sabe lo que puede pasar y siempre es bueno haber estudiado. El fútbol no es para toda la vida.
- Dicen que su hermano pequeño (David, 12 años) sigue sus pasos...
- Va muy bien. Se ríe de mí cuando oye que me animan desde la grada
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