Ya con el trofeo en sus manos, y rodea de pequeños raquetas, le hicimos un par de preguntillas a Gerard Morales, campeón de esta nueva edición del Torneo de la Acampada.
¿Cómo has vivido la final?
“El primer set ha sido rapidito, el chico no ha entrado mucho en juego, estaba algo nervioso. En el segundo hemos empezado más igualados, y la verdad que ha jugado más valiente y ahí se ha notado igual la diferencia de edad, porque estaba mejor físicamente. Parecía que se escapaba en el marcador, pero en el tercer set creo que ha sido muy importante la experiencia, el saber estar. Él no ha podido terminar los puntos como seguro que pensaba. Se ha ido cansando y la veteranía me ha ayudado a favor”.
Un tenista de 34 años, que es un fijo en Calahorra. Todo un veterano, trabajando con la cantera y la base de este deporte. Por ello el preguntamos que sensación le deja este torneo.
“Llevo muchos años viniendo y le había prometido a Carlos que algún año ganaría el torneo. Igual el nivel esta edición no era el de otros años, pero hay que estar para ganarlos. Estoy muy contento. Además jugamos en casa”.
Y además haciendo referencia a los más pequeños ¿Qué nivel hay para las promesas?
“Los crios muy bien. Hay mucho nivel. Los niños están encantados de estar en Calahorra. Es como una semana de vacaciones pero encima jugando a tenis. Es como unas vacaciones en comunión, porque lo que conseguimos es que todos los niños, de Madrid, Cataluña, Valencia, Alicante…se lleven bien entre ellos, jueguen y se conozcan. Súper bien. Una gran experiencia”.
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