martes, 1 de diciembre de 2009

De Calahorra al cielo, gracias a los hermanos POU!!

¿Quién no ha querido en esta vida estar tan cerca de las alturas que casi casi puedas tocar las estrellas con la punta de los dedos?Yo reconozco que es una sensación que tiene que ser única y que siempre me ha alucinado la idea de mirar hacia abajo y estar encima de una nube, encima de todos. Pues gracias a los hermanos Pou, el jueves pasado lo hicimos casi realidad gracias a su exposición sobre sus últimas dos aventuras: Redbull Psicobloc en Mallorca y su aventura en la otra punta del mundo, en un lugar virgen, en los Andes Argentinos. Tengo que reconocer que alguien que esté acostumbrado a ver estas cosas no alucinará pero para mi ganaron mi admiración y sobre todo me dejaron boquiabierto con esas imágenes. Además después de oirlos y de hablar con ellos un poco más después de la firma de pósters y de la sesión de fotos, me parecen dos tíos fenomenales que disfrutan del alpinismo y la escalada como cuando dieron sus primeros pasos en este mundo. Agradecer al club de Montaña de Calahorra por esa semana de divulgación de los deportes de montaña en la que durante una semana han traído a Calahorra lo mejor de este deporte, con excursión final incluida. Este jueves en el suplemento de La Rioja, en mi página de deportes tendréis el reportaje de estas jornadas, en especial del día en que Eneko e Iker pisaron nuestra ciudad y también os recomiendo la entrevista de SuperPablo Álvarez de diario La Rioja (me encanta como escribes Pablo) publicada el día siguiente.

Aquí va la entrevista:
Iker quitaba hierro a su reciente bautizo por los medios como los mejores escaladores del momento “sin más, estamos gracias a lo que hacemos ahí arriba. Entre la gente que está haciendo cosas más nuevas. Pero no hay que creérselo, porque nosotros hacemos lo que nos gusta y si hacemos un nivel alto es porque nos gusta siempre superarnos y seguiremos haciendo a nuestro nivel lo que podamos. Si podemos más iremos a más, pero no pasa nada si algún día hay gente que está mucho más alto que nosotros. No hay que tomarlo como si fuera un record”.
Su hermano nos hablaba de sus próximos proyectos “por ahora todavía estamos descansando de este verano. Hemos pasado mucho tiempo en el Naranjo de Bulnes, fueron dos meses y medio continuos y acabamos totalmente agotados. Estamos ahora más tranquilos, entrenando por casa y estudiando proyectos para el próximo año. Tenemos muchísimas ideas pero tenemos que concretarlas en breve, pero saldremos fuera durante bastante tiempo. También necesitamos bastante tiempo entre historia e historia para cargar las pilas e ir con ganas. Para hacer ascensiones difíciles la cabeza debe ir al cien por cien y el cuerpo a tope”. También volvió a sus comienzos y su financiación “hay un momento clave en nuestra carrera, cuando en el 2002 o 2003 decidimos que además de nuestra pasión y nuestro hobby iba a ser nuestro trabajo, acabamos la carrera y nuestra vida estaba vinculada a la montaña. Entonces conseguimos patrocinadores serios que nos acompañaban en todas las expediciones. La clave es que ha habido gente que en el momento que ha pasado a ser una profesión ha dejado de ser su hobby, si deja de ser tu hobby estás muerto literalmente, como alpinista y como escalador, porque ya no lo estás haciendo como alpinista y escalador, no lo hacer por pasión, porque te gusta sino por dinero. Nosotros no queremos perder la cabeza y saber que lo estamos haciendo porque te gusta lo que haces, quieres seguir haciendo montaña y no te dejas llevar por el tema económico. Luchamos por el equilibrio para estar muchos años más”.
Uno de los puntos de interés fue su último logro en el Naranjo francés, que les ha alzado a la cumbre de la escalada mundial.“Nosotros hicimos la propuesta de 8C/9A, creemos que puede ser 9ª. En cuanto a dificultad es la más difícil. El Naranjo es una montaña que nos vio nacer como escaladores y como alpinistas. Por eso le tenemos mucho respeto. Tiene muchas rutas abiertas, no queda prácticamente nada por abrir. En el 2006 abrimos una ruta por la derecha una ruta de 250 metros (Echauri) la propuesta más difícil en ese momento. Con Orbayu vimos un sitio muy claro para abrir cuatro largos muy explomados, entre una ruta famosísima llamada Principado de Asturias y Marejada fuerza 6 y ahí empalmamos con la línea Mediterránea. Si abríamos línea paralela, teníamos que machacar alguna de las líneas existentes”.
Iker respondió a la pregunta de que se siente al llegar a la cima “no se como explicar. Sobre todo una satisfacción enorme, sobre todo en esta última aventura, porque estábamos en un sitio donde no había estado nadie. Para nosotros el ver esas paredes sin abrir era grandioso. Estábamos solos totalmente y era una satisfacción mundial”.

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