Los rojillos dilapidan a la UDL en el descuento

Calahorra: Julio, Andrés, Cristian, Naya, Picuchos I, Pirri, Beto, Mario Escudero (Gorka, 85´), Mario Barco, Mario León (Miguel, 79´) y Héctor Segura (Javito, 72´).
U.D.Logroñés B: Enrique, Asier, De Las Heras (Sendoa, 84´), San Ildelfonso, Reinares, Lerma, Alberto (Orko, 89´), Tamayo (Cameros, 74´), Sota, Mazana y Zabala.
Goles: 0-1, Mazana (16´); 1-1, Héctor Segura (45´); 1-2, San Ildelfonso (48´) y 2-2, Picuchos I (94´).
Árbitro: partido dirigido por el señor Martínez Álvarez, acompañado de Litim y de Andrés Martínez. Mostró amarilla al local Escudero y a los visitantes Asier, San Ildelfonso, Lerma y Tamayo.
Incidencias: Municipal de La Planilla ante unos 400 espectadores. La Crianza Rojilla animó durante todo el partido. Se guardó un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas del desastre de Japón.

Pasaban más de cuatro minutos de los 90 reglamentarios cuando llegó el gol del empate para los pupilos de Javier Salvatierra, que apuraban sus últimos cartuchos mientras que el banquillo de la UDL pedía el tiempo al colegiado. Los rojillos sacaban de esquina y el esférico llegaba al segundo palo, donde Picuchos I, el capitán local, totalmente solo, controlaba y “fusilaba” al fondo de las mallas. Un gol con sabor a victoria y que hacía justicia a un partido en el que los locales igualaron por dos veces el marcador, y que abre algún ápice de esperanzas para los calagurritanos cara a los play-off. A pesar de estar descolgados en la tabla, el CD, ha cuajado y ha sacado buenos resultados ante los equipos de la zona alta. Picuchos firmó la última ocasión de un partido muy igualado, en el que ambos conjuntos tuvieron su momento y en el que los locales fueron a remolque todo el encuentro, con dos goles vitales y logrados en dos instantes sin tiempo de reacción. El primero, lo lograba Segura superado el minuto 45, y el segundo Picuchos I cuatro minutos por encima de los 90. La primera parte fue muy equilibrado, con dos equipos bien armados, que tenían las ideas claras. Los locales querían explotar su velocidad y sorprender con zarpazos y aparaciones rápidas en el ataque, con los laterales con mucho recorrido y Barco ayudado por León en el eje, que daba oxígeno a Pirri en la divisoria. Mientras que Escudero tenía que hacer el “trabajo sucio”, para robar e intentar evitar la salida de la UDL. Por su parte el conjunto rojiblanco, ayer de verde, cuajó una gran primera mitad. Volcado al ataque y con el protagonismo en todo el campo. La Unión era superior y buscaba una y otra vez la portería defendida por Julio, pero no lograba el gol. Salieron metidos en el encuentro y fueron de más a menos, al contrario de su rival. Tamayo y Alberto rompían por las bandas, mientras que Sota y Mazana se revolvían en las inmediaciones del área. Zabala, volvió al Municipal con tanda de buenas acciones, que llevaron el peligro sobre la meta local. El ariete de Arnedo, fue el primero en avisar en el minuto 3, con un disparo con rosca que pasó muy cerca de la cruceta. Tamayo iba a errar en su disparo, en una gran asistencia de Lerma. Barco tendría en sus botas la primera ocasión rojilla, en un mano a mano que perdió ante Enrique. En el primer cuarto de hora, la UDL se iba a adelantar en el marcador gracias a Mazana. Reinares concetaba con Sota, el delantero logroñés dejaba a Mazana que rompía de frente y delante de Julio no perdonaba. Ante el gol visitante, el Calahorra reaccionó y empezó a tener ocasiones más claras. León se encontraba muy cómodo y explotaba los espacios que encontraba en la defensa verde. León sería el protagonista en el 23, con un disparo entre los tres palos que iba a sacar Ildelfonso evitando la igualada. De Las Heras puso en un serio compromiso a su portero, con una mala cesión, que casi roba por muy poco Mario Barco. Pirri mandaba en el juego calagurritano metiendo pases arriba. La UDL pasaba por sus peores momentos, cuando Tamayo dio el susto a la parroquia local, recogiendo un pase en posición más que dudosa, se plantaba mano a mano dentro del área pero Julio estaba acertado para despejar con la bota. El Calahorra por su parte quería irse a los vestuarios con un resultado positivo. León a falta de siete minutos se fue de todos sus defensores y sacó un centro raso que Reinares en su intento de despejar casi cuela en la escudra. Gran intervención de Enrique. Ya con el tiempo cumplido, el Calahorra botaba una falta, abría al extremo que centraba para Segura, que en un arranque de rabia batía a Enrique. Un gol en un momento psicológico.
Poco duró la alegría en casa del “pobre”, ya que Ildelfonso iba a aprovechar un fallo en la zaga local para adelantar nuevamente a su equipo en el marcador en el 48, después de tres rechaces a bocajarro sobre Julio. A raíz del gol, la UDL se resguardó, retrocedió líneas para matar a su rival al contragolpe, con dos líneas bien colocadas que dejaban pocos espacios y cortaban los pases a las bandas de los rojillos. Javito entró para dar más empuje y ayudó en el eje. El Calahorra llegaba pero por muy poco no podía finalizar las jugadas. Naya se sumaba a los balones parados y Barco no llegaba por muy poco a los remates en boca de gol. Los rojillos jugaban a contrarreloj, con todo el equipo volcado y metido en el campo logroñés. El Calahorra dispondría de muchas oportunidades a balón parado en los últimos 15 minutos. Naya dispondría de una en el 85, después de peinar un poco Barco. La única ocasión visitante fue a parar al larguero en el 40, a cabezazo de Alberto. Enrique atrapaba un remate de cabeza de Barco. Los rojillos ponían cerco al área logroñesa. Hasta que por fin lograron su recompensa de las botas de su capitán, Picuchos, que enganchaba en el segundo palo y mandaba el esférico al fondo de la portería.