lunes, 19 de septiembre de 2011
Jo ayer san Mateo no nos echó una mano en el Palacio de los Deportes, y el Natur cayó ante uno de los mejores equipos de la liga ASOBAL, pero también tenemos que tener encuenta que la mala suerte, los palos, y por supuesto los señores colegiados que una vez no usaron la misma bara de medir para ambos equipos, con exclusiones en momentos claves, al final el primer tiempo nos quedamos sin dos jugadores y detalles que deja mucho que desear. LA entrada un poco floja pero es que la competencia del Natur a esa hora era dura, el Madrid por la tele y la final del Eurobasquet. Ayer nosotros también fuimos partido de tele en Teledeporte. Y que decir que hay que recordar que era San Mateo por lo que hay gente de vacaciones, gente en los toros, en la pelota...iba a decir en los actos de la calle pero es que en fiestas de Logroño eso no hay. Después enganchamos un bocadilo de tortilla de patata, escandaloso, fuegos artificiales (que son lo mejor que hay en estas fiestas) y luego el concierto del Pescao (muy bueno, con mucha marcha, energía y una forma genial de acabar el día, porque tenía muchas ganas de subir a la capi de fiesta.
Os dejo la crónica de mi amigo Martin, que es una gozada leerle.El Ademar es un grandísimo equipo. Sin duda, uno de los mejores cuatro de la Liga Asobal. Pero a su larga lista de figuras, ayer se sumaron dos nombres más: Enrique Ríos Martín y Rafael Alberto García Mosquera, los colegiados que fueron determinantes en algunos pasajes del encuentro. Sin necesidad de ello, decantaron ayer las cosas para el cuadro ademarista, que se llevó el triunfo del Palacio de los Deportes (25-28).
También es cierto que el Naturhouse no ayudó a cambiar el curso de la historia. Los franfivino no tuvieron un buen día y algunos de los errores del partido con el Barcelona se volvieron a repetir sobre la pista riojana: las pérdidas de balón, los fallos en los pases y las faltas en ataque se repitieron y el Naturhouse perdió el control del partido ya en el primer tiempo. Pero lo que terminó liquidando al conjunto logroñés fue su falta de puntería en situaciones sencillas, frente al portero rival. Entre los palos y la correcta tarea de Venio Losert (no fue determinante pero sí ayudó a su equipo en varias oportunidades), el Ademar se hizo con el control del partido rápidamente.
En defensa, por el contrario, los de Jota González hicieron un partido serio, utilizando varios sistemas para frenar a los cracks como Carlos Ruesga, Álvaro Ferrer, Antonio García o Rafa Baena. Comenzó Jota colocando un 5-1, con Curuvija de adelantado. Luego, cuando Ruesga empezó a entonarse, Arrieta le custodió con una mixta. De eso pasó a un 6-0 tradicional, para luego, ya en la segunda parte, sorprender con un 4-2 y otra mixta. Así, el Ademar no lo tuvo fácil y se debió emplear a fondo para mostrar su calidad y superar a un Jorge Martínez que detuvo 19 lanzamientos de los hombres de Isidoro Martínez, especialmente a Antonio García. El internacional, pese a ver portería en cuatro ocasiones, se estrelló con el portero asturiano hasta en seis oportunidades.
Exclusiones decisivas
El comienzo del Ciudad de Logroño no fue brillante. Los errores en ataque le hicieron empezar con mal pie y para el minuto 7 caía 1-4. Sin embargo, los de Jota González afinaron su balonmano, y mientras Jorge se crecía en la portería, Prce, Tioumentsev, Dujshebaev y García Vega (muy bien en la conducción del equipo) igualaron las cosas. A partir de ahí -minuto 15- todo fue un ida y vuelta, un encuentro igualado y que podía caer para cualquiera. Pero los árbitros y los postes lo impidieron.
Sobre el final de esa primera parte, en el Ademar apareció Carlos Ruesga y los de León se colocaron arriba con un margen de tres goles. Pero en los instantes finales, los árbitros se cargaron el espectáculo, excluyendo a Ales Silva y a Rubén Garabaya.
Dos minutos que fueron decisivos, no tanto por la efectividad del Ademar que no pudo ampliar las cifras más que por un gol, sino por el daño mental que provocó en los jugadores del Ciudad de Logroño. Cuando quiso reaccionar el conjunto franjivino, ya era demasiado tarde. Incluso, en los últimos diez minutos se colocaron a dos goles de su adversario, que volvía a chocar contra Jorge Martínez.
Pero en el momento indicado de dar la puntilla, Víctor Hugo López, Nikola Prce o Miguel Ángel Velasco se chocaban con el palo. La historia ya estaba decidida. Pese a lo irregular de su juego, el Naturhouse mostró que no será el mismo equipo anodino de la temporada pasada. Hay motivos para la ilusión. Pese a no haber sumado ningún punto todavía, algo que era previsible desde que se dio a conocer el calendario. Por eso, el partido en Torrevieja del sábado que viene dirá en qué situación está el equipo.
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